martes, 2 de julio de 2013

Cuarto Menguante (Fragmento de una historia...)

No solía llegar tarde a trabajar, a decir verdad nunca llegaba tarde a ninguna parte. Pero esa mañana ya habían pasado más de 40 minutos de la hora de entrada y aún no llegaba. Su compañero del escritorio contiguo empezaba a preocuparse un poco cuando lo vio entrar por la puerta con el afán característico de un hombre puntual cuando se retrasa y una bolsa plástica en la mano.

- ¡Caramba! Ya empezaba a preocuparme. ¿Dónde estabas?
- Estaba comprando algo.
- ¿A esta hora? ¿Qué estabas comprando?

Sacó el contenido de la bolsa y se lo enseñó.

- ¿Un calendario?
- No es cualquier calendario. Es un calendario lunar.
- ¿Un calendario lunar? ¿Para qué?
- Para saber cuando sale la luna.
- Algunas veces pienso que estás loco de verdad.

Él le respondió sólo con una sonrisa.

En los días siguientes, cada tarde, antes de terminar la jornada, lo veía mirar hacía el firmamento por la ventana, luego marcaba una X sobre la fecha actual y contaba las casillas de los días siguientes.

- ¿Qué estás haciendo?
- Estoy esperando el cuarto menguante.
- ¡Ja! ¿Y desde cuándo te gusta el cuarto menguante de la luna?
- Desde que la vi sonreír por primera vez.

GIOVANY